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Hidrocele
Un hidrocele es una inflamación del escroto que ocurre cuando se acumula líquido en el recubrimiento delgado que rodea el testículo. El hidrocele es muy común en los recién nacidos y suele desaparecer por si solo al año de vida. Sin embargo los niños mayores y los hombres adultos también pueden manifestar un hidrocele debido a una inflamación o lesión dentro del escroto.
El hidrocele no se puede prevenir en el caso de los bebés recién nacidos ya que es una alteración en el desarrollo anatómico. Por lo cual es importante visitar al pediatra y al urólogo para seguir su evolución.
En el caso de los adultos si se podría prevenir o evitar de manera parcial que aparezca, todo esto evitando actividades que favorezcan microtraumatismos testiculares. Para los hombres adolescentes y adultos, la mejor protección contra un hidrocele es mantener los testículos y el escroto libres de lesiones, usando adecuadas protecciones y ropa interior ajustada, si participa en deportes de contacto o trabaja en actividades que conlleven algún riesgo de contusión.
Generalmente, el hidrocele, una vez que está establecido, no suele desaparecer a no ser que sea secundario a una inflamación y aparezca de manera simultánea, en cuyo caso este hidrocele se considera reactivo y puede disminuir o desaparecer cuando cede la inflamación.
Un hidrocele no suele ser doloroso o dañino y puede que no necesite ningún tratamiento. Sin embargo, si tiene hinchazón en el escroto, visite a su médico para descartar otras causas.
El hidrocele puede ser:
Congénito:
Se genera por el paso de líquido desde el interior del abdomen hacia el escroto a través de una pequeña comunicación, que no se ha cerrado completamente durante el desarrollo del feto. Este tipo es el más frecuente y se denomina también hidrocele comunicante. Dentro de este tipo, también se encuentra el hidrocele no comunicante, que surge cuando la comunicación entre el abdomen y el escroto se cierra completamente, pero queda líquido atrapado en su interior. Si este líquido queda retenido en la región inguinal (en lugar de en el escroto), se le da el nombre de quiste de cordón.
Adquirido:
Este tipo de hidrocele se manifiesta por lo regular durante la adolescencia, se origina por exceso de producción de líquido o por falta de reabsorción del mismo, por parte de las cubiertas que rodean al testículo y también se le denomina hidrocele no comunicante.
Por lo regular el diagnóstico se hace mediante un examen del escroto, que podría parecer agrandado, normalmente indoloro y suele tener una consistencia elástica.
Como parte del examen, se suele alumbrar detrás de cada testículo (transiluminación) con una luz, para detectar masas sólidas que pueden ser causadas por otros problemas, como cáncer de testículo.
Sin embargo, debido a los avances técnicos y a las grandes ventajas que otorga la ecografía, esta se ha fijado como la herramienta principal para diagnosticar este padecimiento y es por medio del examen con ultrasonido, que se puede diagnosticar el hidrocele, cuantificarlo con precisión, además de descartar complicaciones y lesiones en el testículo y sus estructuras adyacentes.
Síntomas y Diagnóstico
El hidrocele no suele producir síntomas a no ser que sea de gran volumen. En este caso, los síntomas podrían ser:
- Hinchazón indolora de uno o ambos testículos
- Molestias debidas al peso del escroto
- Hinchazón o irritación de la piel del escroto. Escroto a tensión.
